martes, 20 de marzo de 2012

Quiche

Mis hijos y mi esposo vienen a comer a casa todos los días. Eso significa que tengo que tener el almuerzo listo antes de una, para que los niños puedan comer algo rico y rápido antes de llevarlos de vuelta al colegio a las dos de la tarde; además tiene que haber suficiente comida para Fernando, mi marido y yo a las 3 que es cuando comemos los demás. Sino tendría que volver a cocinar a la vuelta del cole, y por mucho que me guste la cocina, mi afición no llega a tanto…
Para mí uno de los platos más fáciles para estas horas locas (además de la pasta, por supuesto) es la Quiche. Normalmente tengo uno dos paquetes de pasta brisa (masa quebrada) o de hojaldre a mano, así que puedo tener lista esta receta en 40 minutos o menos para la tropa. Sólo hace falta un poco de ensalada para un tener un almuerzo completo y nutritivo.
Quería llamar a este post Quiche Lorraine, porque así es como lo llamamos en casa, pero al parecer si se agrega queso a la quiche ya no se llama Lorraine, sino Vosgienne. Y como no quiero meterme en problemas con algún lector francés , simplemente la llamaré Quiche.
Esta receta es de un sitio francés llamado Quiche-Lorraine.com. En esta página he encontrado la receta que mejor me va. Hoy he hecho mi quiche de dos maneras diferentes, en primer lugar he hecho una grande (normal) con crème fraîche en el relleno como pide la receta y además he hecho mini-quiches, con nata en lugar de crème fraîche. También he usado pâte sablée (masa quebrada) en lugar de feuilletée paté (pasta de hojaldre), sobre todo porque la pasta brisé o masa quebrada sube menos y lo que queremos es que el relleno sea el gran protagonista de esta receta y no la masa; pero no dudéis en usar la que más os guste o tengáis a mano (yo no descartaría usar una base para pizza si es lo que tenéis en la nevera)
Alors, on y va.

Les Ingrédients
  • 1 rollo de masa quebrada (brisa)
  • 3 huevos enteros
  • 30 cl (300 ml), crème fraîche
  • 25 cl (250 ml) de leche
  • 300 gramos de beicon o lardons
  • 150 gramos de queso Emmental rallado
  • Sal, pimienta, nuez moscada
Procedimiento
Precalentamos el horno a 250 °C (480 ºF).
Colocamos la masa en un molde para tartas redondo (o cortamos redondeles con un cortador de galletas o una taza – eso es lo que yo usé-y los colocamos en una bandeja para muffins, asegurándonos de presionar un poco a los lados y el fondo).
Pinchamos la masa por todo el fondo con un tenedor para que no suba. La receta de la página web, que es con hojaldre, recomienda ahora que horneemos la base durante 10 minutos hasta que la masa esté ligeramente dorada; yo lo hice así con la quiche grande, pero tuve que cubrirla con papel aluminio a media cocción porque los bordes se estaban quemando. Así que me salte este paso con las mini quiches y salieron perfectas, por eso os recomiendo que hagáis lo mismo.
Ahora, el relleno. Cocinamos el beicon en una sartén a fuego alto hasta que esté ligeramente tostado. Escurrimos el exceso de grasa y reservamos. En un tazón grande, mezclamos los huevos y la crema con unas varillas. Añadimos la leche gradualmente mientras continuamos mezclando. Añadimos sal y pimienta al gusto, por último añadimos la nuez moscada.
Colocamos el beicon sobre la base, vertemos el relleno y espolvoreamos uniformemente el queso Emmental. Horneamos la quiche durante 30 minutos a 250 °C. Después de 25 minutos, pinchamos la quiche con un cuchillo, si sale limpio, sin restos de crema, la quiche está lista. Para que quede más tostadita por encima, podéis ponerla bajo el grill durante cinco minutos, pero tened cuidado de no quemar la parte superior de la quiche.
Bon appétit!

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